FICHA TÉCNICA
Director: Matthew Vaughn
Guión: Ashley Miller, Zack Stentz
Título Original: X-Men: First Class
Género: Acción, Ciencia Ficción, Aventura
Origen: EE.UU.
Duración: 132 min.
Estreno España: 03 Junio 2011
SINOPSIS
La acción se sitúa en los años 60, al principio de la era espacial y en el punto álgido de la Guerra Fría, cuando las tensiones entre Estados Unidos y la Unión Soviética amenazaban a todo el planeta, y cuando se descubrió la existencia de los mutantes. Antes de que Charles (James McAvoy) y Erik (Michael Fassbender) adoptasen los nombres de Profesor X y Magneto, eran dos jóvenes descubriendo aun sus poderes y antes de convertirse en enemigos, trabajaban juntos con otros mutantes para detener la mayor amenaza que el mundo hubiera conocido nunca. ¿Cómo se juntaron los X-Men? ¿Por qué está Charles en una silla de ruedas? ¿Cuál es el origen de la Mansión X y de Cerebro? Todas esas preguntas hallarán respuesta en este trepidante film.
CRÍTICA
Un nuevo Blockbuster llega, aunque en sus semanas de exhibición ya se estima que no alcanzará las desorbitadas cifras de otras propuestas veraniegas como Piratas del Caribe. No obstante, la película ya ha acumulado en dos semanas algo más de 227 millones de dólares en todo el mundo, y los rumores sobre la secuela, más candentes aun después del parón del rodaje de Lobezno 2, ya se han confirmado.
El británico James McAvoy (Shameless, U.K., Wanted, El Último Rey de Escocia) y el alemán Michael Fassbender (Centurión, 300) lideran el reparto de la primera generación de mutantes. Interpretando a Xavier y Magneto, respectivamente, estas dos estrellas europeas emergentes en Hollywood, consiguen imprimir carácter y solidez a estos clásicos personajes, casi tanto como en su día aportaron Patrick Stewart e Ian McKellen en la versión más madura de los poderosos mutantes. Pese a que mantienen diferencias ideológicas desde un principio, una profunda amistad se fraguará entre ellos, llegando a considerarse como hermanos. Eso sí, Xavier creció rodeado de lujos y con la agradable compañía de Mística, mientras Magneto creció rodeado de dolor y con una sed irrefrenable de venganza. Dos pasados diferentes que marcarán el destino que está por llegar.
El polifacético Kevin Bacon realiza una correcta interpretación en el papel del villano Sebastian Shaw, un poderoso mutante que marcó trágicamente a Magneto en el pasado, cuando sólo era un niño preso en un campo de concentración nazi.
Situada en el contexto histórico de la Guerra Fría, y más concretamente en la crisis de los misiles cubanos, X-Men: Primera Generación se presenta como una acertada precuela a la trilogía de X-Men, y superior en muchos aspectos a X-Men Orígenes: Lobezno. Con una factura técnica impecable, clásica de Marvel Studios, y un escandaloso presupuesto de 160 millones de dólares, hacen de ella una propuesta más que recomendable para los fans del género y para la incoherente masa devoradora de palomitas. No obstante, el director no se arriesga lo más mínimo, al igual que el guión, previsible hasta decir basta.
Para finalizar, una buena cinta de superhéroes con el espíritu clásico de los X-Men y un reparto brillante. Por cierto, Michael Fassbender se ha unido a Noomi Rapace (Millenium), Guy Pearce (La Máquina del Tiempo) y Charlize Theron (Monster) para ser dirigidos por Ridley Scott en Prometheus, la precuela de Alien el Octavo Pasajero.
El británico James McAvoy (Shameless, U.K., Wanted, El Último Rey de Escocia) y el alemán Michael Fassbender (Centurión, 300) lideran el reparto de la primera generación de mutantes. Interpretando a Xavier y Magneto, respectivamente, estas dos estrellas europeas emergentes en Hollywood, consiguen imprimir carácter y solidez a estos clásicos personajes, casi tanto como en su día aportaron Patrick Stewart e Ian McKellen en la versión más madura de los poderosos mutantes. Pese a que mantienen diferencias ideológicas desde un principio, una profunda amistad se fraguará entre ellos, llegando a considerarse como hermanos. Eso sí, Xavier creció rodeado de lujos y con la agradable compañía de Mística, mientras Magneto creció rodeado de dolor y con una sed irrefrenable de venganza. Dos pasados diferentes que marcarán el destino que está por llegar.
El polifacético Kevin Bacon realiza una correcta interpretación en el papel del villano Sebastian Shaw, un poderoso mutante que marcó trágicamente a Magneto en el pasado, cuando sólo era un niño preso en un campo de concentración nazi.
Situada en el contexto histórico de la Guerra Fría, y más concretamente en la crisis de los misiles cubanos, X-Men: Primera Generación se presenta como una acertada precuela a la trilogía de X-Men, y superior en muchos aspectos a X-Men Orígenes: Lobezno. Con una factura técnica impecable, clásica de Marvel Studios, y un escandaloso presupuesto de 160 millones de dólares, hacen de ella una propuesta más que recomendable para los fans del género y para la incoherente masa devoradora de palomitas. No obstante, el director no se arriesga lo más mínimo, al igual que el guión, previsible hasta decir basta.
Para finalizar, una buena cinta de superhéroes con el espíritu clásico de los X-Men y un reparto brillante. Por cierto, Michael Fassbender se ha unido a Noomi Rapace (Millenium), Guy Pearce (La Máquina del Tiempo) y Charlize Theron (Monster) para ser dirigidos por Ridley Scott en Prometheus, la precuela de Alien el Octavo Pasajero.
PUNTUACIÓN: 6,4/10
TRAILER V.O.
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